Cuando hablamos de economía del propósito nos referimos a un modelo económico clave para promover el crecimiento sostenible, mejorar el bienestar humano y reducir las desigualdades.

En palabras de Ángel Bonet, co-fundador de UnLimited Spain, una empresa con propósito es aquella que genera bienestar, cubre una necesidad social real, o que crea un producto o servicio para el progreso de la sociedad.

Para España, este cambio hacia prácticas más respetuosas con el medio ambiente representa una oportunidad crucial para reactivar la economía, transformar la industria y fortalecer su posición en el escenario global. En el panorama actual, la economía del propósito en España implica un desarrollo económico que armoniza el crecimiento con la sostenibilidad ambiental. 

 

Una empresa con propósito es aquella que “genera bienestar, cubre una necesidad social real, o que crea un producto o servicio para el progreso de la sociedad”.

 

Por ejemplo, desde que Iberdrola lanzara el portal Global Green Employment en julio de 2023, la oferta de empleos ‘verdes’ casi se ha triplicado en menos de un año, pasando de apenas 20.000 a más de 50.000 en la actualidad. Este crecimiento está impulsado en parte por la demanda creciente de productos y servicios sostenibles, así como por las políticas gubernamentales favorables y las inversiones privadas en innovación centrada en el propósito.

Oportunidades y beneficios para las grandes empresas

Por eso, las grandes empresas españolas están viendo en la economía del propósito una fuente de oportunidades estratégicas y beneficios a largo plazo.

  • Nuevos mercados y clientes: Los consumidores están mostrando una preferencia cada vez mayor por productos y servicios sostenibles. Según un estudio de Kantar de 2023, uno de cada cuatro consumidores se considera a sí mismo eco-activo dentro de un mercado que ya mueve globalmente 500.000 millones de dólares al año… y que para 2027 podría llegar al billón de dólares, según las últimas proyecciones.
  • Eficiencia operativa y reducción de costos: Adoptar tecnologías limpias y mejorar la eficiencia energética puede generar ahorros significativos. Siguiendo con el ejemplo de Iberdrola, su inversión en 2023 fue de 384,4 millones de euros en proyectos relacionados con las renovables y la eficiencia energética, logrando una reducción significativa de costes en la mayoría de sus operaciones, según su último informe integrado, publicado el pasado mes de abril.
  • Acceso a financiación sostenible: La creciente popularidad de la inversión socialmente responsable (ISR) y los bonos verdes ofrecen a las grandes empresas acceso a nuevas fuentes de financiación. Un buen ejemplo es que, según la Climate Bonds Initiative, el mercado global de bonos verdes superó los 500.000 millones de euros en 2023.
  • Cumplimiento regulatorio y ventaja competitiva: La Unión Europea ha establecido metas ambiciosas para la reducción de emisiones y la economía circular. Por eso, empresas como Telefónica, que se han comprometido a reducir sus emisiones en un 90% para 2025, se están posicionando como líderes en sostenibilidad.

Fondos Next Generation EU y su impulso a las pymes y startups

Sin embargo, más allá de las grandes empresas españolas, las pymes y startups también pueden beneficiarse enormemente de la transición hacia una economía del propósito, especialmente gracias a la financiación de los fondos Next Generation EU.

 

  • Acceso a financiación directa: Los fondos Next Generation EU, destinados a la recuperación económica tras la pandemia, ofrecen una oportunidad sin precedentes para las pymes y startups. De los 140.000 millones de euros que España recibirá, al menos el 37% se destinará a iniciativas basadas en el propósito. Esto incluye proyectos de energía renovable, movilidad sostenible y modernización industrial.
  • Innovación y digitalización: Las pymes que inviertan en innovación tecnológica y digitalización de procesos podrán acceder a subvenciones y créditos blandos. Programas como el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) ofrecen financiación para mejorar la eficiencia energética, reducir emisiones y digitalizar procesos.
  • Creación de alianzas estratégicas: La colaboración entre pymes, startups y grandes empresas es clave para acelerar la innovación. Un ejemplo de ello es el programa Repsol Impact Hub, que apoya a las startups que trabajan en tecnologías limpias.
  • Acceso a nuevos mercados: La inversión en sostenibilidad también abre nuevas oportunidades de exportación. Las pymes que adopten prácticas sostenibles podrán acceder a mercados globales que valoran los productos ecológicos.

 

«Necesitamos apoyo público para construir un futuro más justo, sostenible y próspero para todos, recuperando la vocación de servicio social”.

 

Precisamente estas y otras oportunidades que abre la economía del propósito fueron el motivo central de la participación de nada menos que 14  empresas y organizaciones, en la jornada “Avanzando hacia una Nueva Economía. Propuestas del Ecosistema de Impacto para España”, celebrada en el Congreso de los Diputados a principios de mayo

En ella, Manuel Lencero, cofundador y CEO de la Fundación UnLimited Spain y representante del Círculo UnLimited en el evento, reclamaba más esfuerzos en otro eje vertebrador de los proyectos para llevar el propósito a las empresas, la colaboración público-privada: «Necesitamos apoyo público para construir un futuro más justo, sostenible y próspero para todos, recuperando la vocación de servicio social”.

Retos y perspectivas para la economía del propósito en España

A pesar de las oportunidades, las empresas enfrentan desafíos para implementar estrategias basadas en el propósito.

 

  • Inversión inicial elevada: La adopción de tecnologías limpias y prácticas sostenibles a menudo requiere una inversión inicial significativa, lo que puede ser un obstáculo para muchas pymes.
  • Falta de conocimiento y recursos: Muchas pymes no tienen el conocimiento o los recursos para desarrollar e implementar estrategias basadas en el propósito efectivas.
  • Marco regulatorio cambiante: Las regulaciones en torno a la sostenibilidad y el medio ambiente están en constante evolución, lo que crea incertidumbre para las empresas.

 

En cualquier caso, a pesar de estos desafíos, la economía del propósito ofrece un horizonte prometedor para las empresas en España. La transición hacia prácticas más sostenibles no solo es un imperativo ambiental, sino también una oportunidad para mejorar la competitividad y el crecimiento a largo plazo.

En este sentido, el éxito en la economía del propósito dependerá de la capacidad de las empresas para innovar, adaptarse y colaborar. Las que logren hacerlo se posicionarán como líderes en un mercado que valora cada vez más la sostenibilidad, beneficiándose tanto en términos económicos como reputacionales.